jueves, 16 de septiembre de 2010

Las Musas del Poeta



La Tristeza y la Soledad, son las mejores amigas del poeta, son sus Musas. Y el Amor, es su gran inspirador.

Pero parece ser que este gran poeta que tengo frente a mi. Que me hace disfrutar con cada una de las obras que nacen de la combinación de su corazón, boca y pluma, sólo se dedica en los últimos tiempos a bailar con sus dos damas que se niegan a abandonarle.

No le dejan si quiera, tal ver por celos, hablar con el Amor o preguntarle a alguien para saber qué ha sido de él desde la última vez que se encontraron y hablaron de una joven que le había robado el corazón.

Esas Musas, quieren su corazón para ellas. Así que están dispuestas a permanecer en su vida día y noche para cerciorarse de que ninguna joven se vuelve a hacer con él, para después vaciarlo de amor.

Es por eso que se turnan y durante el dia, es la Tristeza la que le ayuda a componer sus poesías asegurandose de que el Amor no tiene cabida en ellos. Y durante la noche, la Soledad acompaña al joven poeta mientras se sienta en la cama y comienza a ensoñar. Ella es su cómplice, su confidente y él no puede más que agradecerle que este ahí, ya que por lo menos mientras ella es la dueña de su mente puede escribir.

Es dura la vida de un poeta. Es tener un torbellino de sentimientos que van de un polo al otro. O está en el blanco y puro del Amor, o en el negro y tiznado del Desamor o incluso Odio.

Tal vez si el pudiera escoger, no querría semejante profesión. Pero es la que un día cuando le preguntó a su corazón, este respondió.

Aunque has de saber que todo poeta, sueña con algún día dejar de bailar con esas dos Musas y ser prisionero de otra musa más bella, más dulce ... la dueña de su corazón.
La que conoció gracias a que su amigo el Amor les presentó una cálida tarde, cuando sus ojos se encontaron entre tantas miradas perdidas y carentes de emoción alguna. Cuando a través de ellos, sus almas se conectaron y ambos supieron que el otro era el que esperaban. Que debían acercarse a pesar de los temores por las posibles críticas de la otra parte. Y así, conocerse y comprobar que un simple roce, provocaría una chispa que cual electricidad recorrería todo su cuerpo apoderándose de él. La señal.

Ese sería el momento en que se produciría el cambio de musas. Y este poeta soñaba con ese día.
Tal vez esté más cerca de lo que cree. Pero mientras tanto, tiene que agradecre sus obras a ... sus Musas, las Musas del Poeta.
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6 comentarios:

  1. Es la que mas inspiraciones tiene el amor como protagonista, que le acompaña de cerca, desamor, tristeza, pero que bien sienta escribir, fuera todo, como alivia el interior.
    Primavera

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  2. holaaa luna..excelente entrada...sabes me identifico con ese poeta joven....y su historia...
    lo desarrolaste muy bien...
    un abrazooo y un besote!!
    David.V.

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  3. Un post muy bonito y enternecedor sin duda. La vida del poeta siempre será muy dura...entre rimas y versos, se encontrará bailando siempre con sus musas...

    Besitooos!!

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  4. Excelente, no tengo más que decir, solo que no es tan necesario el cambio.
    Aprovechando
    Tienes una nominación en mi blog, espero te puedas pasar por ahí.
    Saludos.

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  5. woow que liindooo.. en cierto punto me senti identificada... no es que sea una poeta de renombre y nada de eso... es solo que cuando escribo... realmente esas son mis musas... me gusto demasiado lo que escribiste^^

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  6. Mi niña hermosa!!! aqui estoy despues de tantos dias de no escribirte y ya tengo lo que te mereces, recorde que tenia un poemita con otras "musas del poeta" asi que espero te guste y lo comparto contigo...

    MUERTE Y SOLEDAD.
    De la mano camina conmigo
    como fiel compañera y amiga
    pero solo se mofa de mí
    y me quiere ver desprevenida
    para llevarme con ella.

    No es tan fuerte como la amiga
    que a mi derecha suspira
    preguntándose cuándo es q volveré.

    ¿Volver? Volver con ella
    que siempre me acompaña y no se da cuenta.

    Y como quisiera disponer del tiempo,
    tiempo para pasar con cada una de ellas,
    de la mano irme con ella
    o con aquella otra que tan ansiosa me espera.

    Y si la compañera de la izquierda
    tuviera el rostro de un hombre,
    ¿me podría enamorar de él?
    Quien sabe, tal vez del hombre
    del que ya me enamore me lleve pronto con ella
    o tal vez solo me deje acompañada
    de la amiga de la derecha.
    *Poetess*
    ***************************
    Besitos desde las sombras...

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